
El viento traía al altiplano
Un olor extraño a recuerdos de toconao y a hierba susurrante como un rió...
Que entraba con su canta y su aroma
En las riberas pálidas del sueño,
Ecos remotos sones desprendidos
Hilos de una esperanza poco a poco desecha
Se apagan dulcemente en la distancia…
Yo ayer iba susurrante como un rió
Llevando lo soñado aguas abajo
Hacia la blanca orilla del olvido.
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